Orpesa volvió a vivir en la medianoche del miércoles al jueves una de las veladas más especiales del verano. Según fuentes municipales, «más de 35.000 personas se reunieron en la playa de La Concha» para asistir a la tradicional Fiesta del Turista en la que el castillo acuático de fuegos artificiales iluminó el cielo de la localidad costera «en un espectáculo único en la provincia y que cada año atrae más asistentes».

Después de deleitar a miles de asistentes el pasado mes de julio en la denominada Fiesta del Mar, la pirotecnia Ricardo Caballer SA volvió a dejar boquiabierto al numeroso público asistente con un espectáculo de luz y sonido de 19 minutos en el que se dispararon 634 kilos de pólvora.

La alcaldesa del municipio, María Jiménez, así como la reina de las fiestas, Ángela Vives, fueron las encargadas de disparar el primero de los avisos del castillo. «Estoy muy satisfecha con este evento. Ha sido diferente a los que habitualmente se disparan y por ello sorprendió a todos los vecinos y visitantes congregados en la zona», explicó la primera edila, quien manifestó que «Orpesa vivió, de nuevo, una gran noche con los fuegos de artificio dedicado a todos nuestros turistas», en una de las citas más multitudinarias del año y que ya se ha consolidado en la programación estival de este municipio.

Al acto no faltó parte del equipo de gobierno, como la primera teniente de alcalde, Araceli de Moya; los ediles Jordi Llopis y Gonçal Tamborero, así como la concejala de Turismo, Silvia Arnau, quien destacó que «los asistentes demostraron en varias ocasiones cuánto estaban disfrutando con sus constantes aplausos y eso nos da una idea de lo mucho que gustó el espectáculo», programado en el ecuador de un mes de agosto en el que la población de Orpesa se dispara.

En este sentido, la edila explicó que tanto el castillo de la Fiesta del Mar como el de la Fiesta del Turista «han sido muy distintos, por lo que el público que ha podido asistir a los dos los vivió de una forma diferente».

Asimismo, desde el Ayuntamiento agradecieron el esfuerzo a los efectivos de Policía Local, servicios sanitarios y bomberos, protección civil, a la pirotecnia y los trabajadores del departamento de Turismo por garantizar la seguridad y que todo transcurriera según lo previsto.