Un gran instituto tecnológico a nivel comarcal y cuya sede principal se ubicará en Orpesa. Es uno de los proyectos más ambiciosos en el que trabaja en la actualidad el área de Desarrollo Local que encabeza Arantxa Martínez, que ultima el borrador del convenio de colaboración con la Universitat Jaume I (UJI) de Castellón, que tutorizará su futuro desarrollo. Se trata de una de las iniciativas que se presentó, por parte de Orpesa, en la última reunión del Pacto Territorial por el Desarrollo Local y Empleo Plana Alta, que se celebró en septiembre, del que son miembros las localidades de Benicàssim, Orpesa, Cabanes, Benlloch, la Serra d’en Garceran, Torreblanca, la Torre d’en Doménec, Vall d’Alba y Vilanova d’Alcolea, así como las centrales sindicales de UGT y CCOO.

La sede principal está planteada en parte del terreno de 3.000 m2 del polígono industrial de Orpesa, cuya compra ya ha sido aprobada por el Ayuntamiento, concretamente en el solar ubicado al lado de la nave en la que está proyectado el almacén municipal. Asimismo, como detalló la concejala del área, el instituto se idea de ámbito comarcal, ya que será el único de estas características en la Plana Alta. De hecho, la sede principal, con el análisis de datos, se asentará en Orpesa, pero el plan incluye pequeñas subsedes en otros municipios integrados en el pacto territorial.

INNOVACIÓN // Con la mirada fijada, «como límite», en el ejercicio 2020, entre los futuros contenidos del instituto destacan el desarrollo de nuevos materiales cerámicos de tipo fotovoltaico, la impresión en 3D para aplicaciones de vanguardia en distintos ámbitos, las aplicaciones de estas nuevas tecnologías en la industria, el turismo y la restauración, así como la apuesta de este tipo de enseñanzas en centros educativos.

De hecho, la apuesta por la innovación tecnológica es uno de los objetivos planteados desde el departamento que lidera Martínez. Así se puso de manifiesto en el último pleno extraordinario celebrado en Orpesa, en el cual el Ayuntamiento que preside el popular Rafael Albert aprobó el presupuesto del 2018, que se ha establecido en 18.211.000 euros.

Si bien todavía no está cuantificado la inversión prevista para poner en marcha el instituto tecnológico, dada la magnitud del ambicioso proyecto, el consistorio solicitará la financiación de la Unión Europea (UE), a través de los programas tecnológicos destinados a poblaciones que cuentan con más de 50.000 habitantes, una cifra que se alcanzará al sumar los residentes en los municipios que integran el pacto.