La alcaldesa de Burriana, Maria Josep Safont; y el concejal de Servicios Sociales, Manel Navarro, se reunieron ayer con los responsables de la empresa concesionaria del servicio de abastecimiento de agua potable y gestión del alcantarillado, Facsa, para la firma del convenio entre ambas partes para la coordinación del pago de las ayudas municipales por deudas generadas por la ciudadanía respecto a este suministro.

Por parte de la mercantil, fueron el presidente de Facsa, Enrique Gimeno; y el jefe de servicio, Alejandro Boado, quienes suscrribieron un acuerdo que, en palabras de los representantes municipales, «es un paso más dentro de los diferentes derechos a nivel de pobreza energética que aquellas personas con peores situaciones económicas han conseguido en Burriana en los últimos tres años. Estamos muy satisfechos de gestionar, desde ahora y de forma más eficaz, esas deudas que puedan contraerse por los servicios de agua y alcantarillado».

COLABORACIÓN // Con el pacto, ambas partes acuerdan establecer los términos de colaboración necesarios «para coordinar y agilizar el pago de ayudas municipales de emergencia social otorgadas a las personas en situación de vulnerabilidad económica».

A su vez, las obligaciones a las que se compromete el propio consistorio son «la evaluación de las circunstancias de necesidad que generan el riesgo de suspensión del servicio y determinar la concesión de ayudas de emergencia social para el pago de deudas a usuarios de Servicios Sociales».

Por su parte, Facsa adquiere la determinación de «facilitar la forma de pago de las subvenciones municipales que sean acordadas por el Ayuntamiento» y, especialmente, «dejar en suspenso el corte de suministro de agua desde el momento en que se reciba la comunicación por parte de los técnicos de los centros de Servicios Sociales Municipales, de que el beneficiario del mismo está sujeto a una ayuda al respecto.