Paleontólogos que trabajan habitualmente en Els Ports reclaman un control sobre los restos de dinosaurios que pueden aparecer en las obras de la N-232, en el tramo entre el puente de la Bota y la masía la Torreta.

El Gobierno de España anunció hace un mes la licitación de las esperadas actuaciones en la carretera, por un importe de 65 millones de euros. El trazado, de 7,75 kilómetros de longitud, cruza los montes de Vallivana y el puerto de Querol, desarrollándose por el término municipal de Morella.

Los especialistas en restos de dinosaurios advierten que esa zona podría tener yacimientos destacados. Entre ellos, en 1997 se descubrió uno de icnitas en Vallivana, en la parte actual de tres carriles de la N-232, uno de los puntos de inicio del nuevo trayecto. Un hallazgo del Cretácico Inferior, de hace 135 millones de años, en el entorno del corral del Macareno. Aparecieron huellas de terópodos que se ampliaron hasta unas 25 en un terreno de caliza. Un espacio declarado Bien de Interés Cultural por su importancia.

buscan arqueólogos // Empresas de construcción se están interesando en acometer las obras y reclaman la figura de un arqueólogo, como indica el proyecto del Ministerio de Fomento, pero no de experto en paleontología. Tal y como se informa en las cláusulas, “se necesita personal técnico cualificado (arqueólogos) y los medios de que dispongan para trabajos de campo: seguimiento del movimiento de tierras, sondeos y excavaciones, y realizar control y seguimiento arqueológico”.

El doctor en paleontología, José Miguel Gasulla, señala que, “además, es necesario un control de restos de dinosaurios porque se intervendrá en puntos de caliza que podrían contener piezas importantes, como las huellas aparecidas de Vallivana, y en zonas muy cercanas tenemos la certeza de que se podrían descubrir yacimientos de gran relevancia”. H