El Ayuntamiento de Peñíscola acaba el año con una operación de amortización de crédito con el fin de disminuir la deuda de la administración local. El pago asciende a 288.000 euros, de modo que queda liquidado uno de los préstamos. Además, durante los últimos meses han adoptado otras dos medidas similares, con lo que la cantidad final devuelta suma 902.000 euros.

La decisión del equipo de gobierno se aprobó en el pleno del mes de septiembre, con la voluntad de destinar dinero procedente de los remanentes de tesorería y del ahorro derivado por las rebajas en la adjudicación de obras. Con ello se reduce parte de la carga financiera que arrastra el consistorio en la actualidad.

MÁS DE LO PREVISTO / Inicialmente, las previsiones de los presupuestos en el 2017 marcaban una amortización cercana a los 1,4 millones, pero el comienzo del abono del crédito de 7 millones contraído para satisfacer las indemnizaciones por sentencias urbanísticas, desde enero, hizo adoptar una nueva postura.

El alcalde, Andrés Martínez, comenta que «una herencia envenenada de gobiernos socialistas anteriores» les exige adelantar la devolución de débito «para poder cuadrar los presupuestos futuros, algo que este equipo de gobierno hace por responsabilidad y gracias a la eficiencia en la gestión de todas las áreas».

El pleno aprobará mañana, en una sesión extraordinaria, la ratificación a las cuentas elaboradas para el próximo ejercicio 2018. Entre las partidas incluyen más de un millón para seguir disminuyendo el endeudamiento municipal. Durante los próximos siete años se deberá proceder de igual forma. «De no ser por estas cantidades a abonar, acabaríamos la legislatura con una deuda cero», según el primer edil.