El comienzo del verano en Peñíscola ha sido movido en lo que a servicios sanitarios se refiere. Los datos aportados desde el Ayuntamiento sobre el funcionamiento de la ambulancia contratada por el consistorio revelan que el pasado mes de junio hubo un total de 123 transportes, más de cuatro por día. Esto supone un incremento del 32% con respecto a las 93 atenciones de junio del 2016.

El buen comportamiento del sector turístico en estos primeros compases de la temporada también conlleva este aumento de las incidencias sanitarias. En cuanto al primer semestre, se contabilizan 719 emergencias.

A esta cifra hay que sumar la del vehículo sanitario de playas, en funcionamiento desde el 1 de junio, de manera conjunta a la de los puestos de socorrismo. Prevén que pronto se conozcan los primeros datos, que apuntan a una subida, con diversas intervenciones de rescates de bañistas.

La localidad multiplica su población en verano hasta las 100.000 personas de julio a septiembre, pero no cuenta con una base de ambulancia por parte de la Conselleria. Las más cercanas son el soporte vital básico (SVB) de Benicarló o las SAMU de Vinaròs y, más recientemente, Torreblanca. Por ello, desde hace años, el consistorio sufraga un vehículo alternativo, si bien no forma parte de la red del CICU ni del sistema de emergencias del 112.

La temporada pasada, la Generalitat desaconsejó este servicio paralelo, ya que la normativa estatal impide la duplicidad de prestaciones por parte de administraciones distintas. Ante este panorama, se solicitó una base de ambulancia a Sanidad, sin resultado, y se presupuestó este año la cifra de 190.000 euros para licitar una unidad de transporte no asistido (TNA). El alcalde, Andrés Martínez, manifestó hace unos meses que no pueden tener un vehículo «en las mismas condiciones en las que lo venimos prestando hasta ahora, pero el equipo de gobierno que presido no va a permitir que los 1.600 servicios anuales queden sin atención».

Otra peculiaridad radica en el emplazamiento del transporte municipal. Al no estar integrado en los recursos del departamento autonómico, no puede ubicarse de forma permanente junto al nuevo centro de salud. Por ello, sigue estando en las inmediaciones del anterior edificio sanitario, propiedad del consistorio.