El Ayuntamiento de Peñíscola ha dado los primeros pasos para contar con una nueva plaza de arquitecto técnico en su plantilla. El pleno aprobó una modificación en la relación de puestos de trabajo, de modo que, tras la jubilación del anterior celador de obras, contratado como personal laboral, se procede a la transformación en funcionario y se sumará a los otros dos aparejadores que ya integran el área de Urbanismo. Tal y como indica la documentación incluida en el expediente, el cometido principal que tendrá esta persona será la de inspeccionar las obras que se desarrollen en todo el municipio.

El edil de este área, Romualdo Forner, comentó que, tras la baja del anterior empleado, «convenimos que lo más adecuado era contar con una persona con una formación técnica superior». Desde el grupo socialista, Óscar Ayza mencionó que este cambio también podría servir «para hacer una inspección de actuaciones más amplia, con el fin de detectar a empresas y profesionales que carecen de la documentación, con lo que perjudican a quienes sí cumplen».

Por otro lado, en la sesión se dio cuenta del regreso de uno de los dos arquitectos municipales, que en los últimos tiempos estuvo ausente debido a una excedencia laboral.