Las melodías representativas de las celebraciones de moros y cristianos marcan el compás de la recta final de las fiestas patronales de Peñíscola. Anoche se repitió el ritual que viene produciéndose desde hace ya más de tres décadas y los integrantes de la asociación que lleva a cabo los desfiles de las escuadras de ambos bandos comenzaron su actividad con la ceremonia de presentación de los estandartes.

El templo de la Virgen de la Ermitana, en la parte alta del casco histórico, fue el marco en el que se desarrolló este oficio religioso, que contó con la presencia de la reina de las fiestas, Alejandra Martín, las integrantes de las cortes de honor y las autoridades.

Los cargos de este año de la Associació Cultural de Moros i Cristians tuvieron un papel especial. La dama de la entidad, Ana Rita Rovira; y el Moro de l’Any, el patrón mayor de la cofradía de pescadores, Miguel Castell, serán una parte fundamental en los próximos días. Tras partir del templo, los estandartes salieron a la puerta y comenzó a sonar la música y la formación de las primeras filaes. Este arranque culminó con un nutrido pasacalles.

Por otro lado, ayer, la meteorología afectó a actos como la convocatoria de la concentración de motos Vespa y Lambretta, que debían exhibirse en la explanada del paseo marítimo. Además, se suspendió el parque infantil previsto en la zona de Peñismar. En cuanto a la programación taurina, las reses de Pedro Fumadó y la solta de vaquillas de Bous la Ribera tuvieron que acabar antes de tiempo. También se canceló una actuación de Ménades de Irta.

Las previsiones del tiempo indican que hoy mejoran las condiciones. Esta tarde, a las 19.00 horas, comenzará el primer desfile de moros y cristianos, que saldrá desde la avenida Papa Luna, a la altura del acceso a la zona deportiva, y que culminará en la Plaça de Bous. De madrugada, llegará uno de los momentos más esperados de este año, la actuación del grupo Fangoria, que recupera la tradición de traer a figuras relevantes de la música.

LA GALA DE REINAS / La concejala de Fiestas, Raquel París, hizo balance de la gala conmemorativa de las 50 reinas de la localidad, celebrada el jueves. «Nos hemos levantado con la sensación de que fue todo un éxito y una cita repleta de emociones, historia y tradiciones». El acto reunió a la mayor parte de representantes e incluyó un reconocimiento al alcalde que impulsó esta figura en el año 1968, Manuel Arnau.