Las playas de Peñíscola ya están listas para recibir a los visitantes en el mes que da la bienvenida al verano. Operarios del consistorio y de las empresas concesionarias trabajan a contrarreloj para tener a punto los servicios correspondientes a unos 6 kilómetros de costa, entre la zona norte y la sur. Una actividad que estuvo marcada por las lluvias de esta semana, ya que ralentizó los preparativos, y a primera hora de la mañana de ayer aún se apreciaba movimiento en algunos puntos.

Las principales novedades de la temporada son la incorporación de cinco nuevos baños públicos en el paseo marítimo, que se suman a los ya existentes, mientras que la colaboración entre la localidad y la Agència Valenciana del Turisme supone la renovación de parte de las pasarelas de madera y la creación de una nueva área de juegos para los pequeños.

REVISIONES / El concejal de Turismo y Playas, Rafael Suescun, señaló que en estos momentos del año «siempre quedan cuestiones a mejorar y revisar, pero los equipos han trabajado de forma coordinada para que este fin de semana, en el que Peñíscola ya cuenta con un buen número de gente, haga gala de los motivos por los que hay banderas azules y múltiples certificados de calidad».

Entre otros aspectos, se comprobaron 100 puntos de agua para lavapiés y duchas, y comenzó el socorrismo, que progresivamente llegará a todos los puestos de vigilancia. En total, el municipio invierte cerca de 700.000 euros anuales en la costa.