La reclamación del equipo de gobierno de Peñíscola por las mejoras de seguridad vial pendientes en la carretera CV-141 centró la visita a la localidad del director territorial de la Conselleria de Presidencia en Castellón, Adolf Sanmartín. Durante el encuentro, el alcalde, Andrés Martínez, recordó que en el primer semestre del 2015 se hicieron labores de asfaltado y había consignación presupuestaria para ejecutar mejoras en un tramo de 1.300 metros que no se han producido.

Martínez afirmó que desde el consistorio no están “solicitando una inversión multimillonaria para la ejecución de un nuevo vial”, sino que reclaman lo que se les prometió, “y para lo cual se preparó la carretera meses antes”. Las mejoras comprendían la creación de una acera para el paso de peatones, aprovechando caminos existentes, en sustitución de la actual cuneta.

El vial supone la principal puerta de entrada al casco urbano de Peñíscola, ya que lo conecta con la N-340 y la autopista AP-7. El edil de Urbanismo de la localidad, Romualdo Forner, criticó recientemente la falta de actuaciones por parte de la Generalitat.

El primer edil también preguntó por la recuperación del proyecto redactado por el Consell para la mejora de los accesos a la zona sur, así como por la adecuación cuanto antes el vial N1. H