Es la modalidad de alojamientos que ha experimentado un mayor crecimiento en los últimos años y ese auge puede ser aprovechado por parte de quienes no cumplen con la normativa vigente. Para atajar el intrusismo en los apartamentos vacacionales, el Ayuntamiento de Peñíscola y Turisme Comunitat Valenciana firmaron ayer el primer convenio de la provincia en el que las dos administraciones contribuirán para detectar y atajar los alquileres fuera de la regulación.

El secretario autonómico de Turisme, Francesc Colomer, destaca que desde su área luchan «contra la falta de calidad y aspectos como el fraude y la economía sumergida no son admisibles». «Estamos por los intereses de quienes dan la cara, tributan y contribuyen en el desarrollo de la economía y el empleo», detalla. Una de las principales medidas será la ayuda entre los inspectores y la policía de la Generalitat con los agentes locales, «por lo que se compartirá información y conocimientos sobre la legislación», añade Colomer.

Habrá mayores controles sobre la identificación de los propietarios, los números de registro correspondientes, los periodos de comercialización o las plataformas de reservas más utilizadas.

El alcalde, Andrés Martínez, incide en que la firma de este acuerdo «es un ejemplo de colaboración entre instituciones y muestra que hay una relación extraordinaria, ya que a pesar de las discrepancias ideológicas hay objetivos claros y ganas de trabajar unidos y crear cosas muy importantes para este sector».

A esta iniciativa pionera de Peñíscola prevén la próxima incorporación de Orpesa, además de una iniciativa planteada desde la Asociación de Empresarios de Alcalà de Xivert-Alcossebre, que pondrá en valor los alojamientos de calidad que se encuentran ubicados en su término municipal.

BALANCE DE JULIO

En lo referente a los primeros compases de la temporada de verano, finalizado el mes de julio, Francesc Colomer afirma que dentro de uno días harán el primer balance y un pronóstico de agosto. «Han aparecido noticias sobre una fluctuación a la baja, pero a pesar de que julio y agosto son claves, lo importante es abrir la visión a todo el año. Los parámetros que perseguimos son la desestacionalización y la rentabilidad», dice. El dirigente autonómico recuerda que en los últimos ejercicios «el aumento ha sido bastante insostenible» y no sabe «si el deseable, ante la sensación de reventón que puedan tener los turistas».

Una de las causas de estas turbulencias está en la recuperación de mercados extranjeros, que tras sufrir crisis políticas vuelven a ser considerados seguros por los visitantes. Un fenómeno que arrastra al conjunto de la oferta, al tener una menor cuota de gente llegada desde el extranjero y subir la competencia para atraer al segmento nacional.

«En este mundo la geopolítica nos hace ser más frágiles, por lo que debemos ofrecer un producto de más calidad, para que en cualquier coyuntura, Peñíscola y el conjunto de la Comunitat sean fuertes y tengan unos valores diferenciales, al margen de la situación que pasen competidores de características similares», concreta Francesc Colomer.

El alcalde detalla el sentido de otras fórmulas de colaboración aplicadas, como la asistencia conjunta a ferias o planes de competividad, «de manera que cada euro que invierte cada administración se destine a cuestiones eficaces para el sector».