El área de Urbanismo del Ayuntamiento de Peñíscola ha puesto en marcha la campaña de seguimiento de los solares que no se ajustan a las normas de limpieza marcadas por la ordenanza municipal. Uno de los objetivos de la medida es que estas fincas se encuentren en las mejores condiciones posibles antes de la llegada de la temporada veraniega.

Previamente se ha desarrollado un trabajo de supervisión, entre los meses de mayo a diciembre, en el que se ha analizado el estado de las propiedades. Durante las últimas semanas se ha procedido al envío de cartas, en las que se recuerda a los propietarios sus obligaciones, con la posibilidad de interponer multas coercitivas a quienes no cumplan. Unas sanciones que, según resaltan fuentes municipales, pueden ser del 10% del importe estimado de la limpieza, acumulables en el caso de seguir sin respuesta.

La zona de Peñíscola en la que se hace más evidente la falta de limpieza de solares es el barrio de Llandells. En algunos casos, la presencia de matorrales se mantiene desde hace años, llegando a acumular alturas considerables.

El concejal de Urbanismo, Romualdo Forner, indicó que en este caso “se dan problemas añadidos, al estar muchos solares en concursos de acreedores y por quiebras de empresas, por lo que es difícil poder actuar”. H