La brigada municipal de obras de Peñíscola ha iniciado esta semana una serie de labores de mejora en las instalaciones del colegio público Jaime Sanz. Los trabajos consisten en el arreglo de parte del pavimento del patio, que en los últimos tiempos había descendido de nivel, por lo que se producían acumulaciones de agua tras las tormentas, dejando este sector impracticable.

Los operarios se dedican en la primera fase a levantar el cemento del suelo para, posteriormente, aplicar una nueva capa, a la misma altura que el resto de la zona de juegos. La concejala de Educación, María Jesús Albiol, comenta que estas medidas «se realizan de manera periódica, dentro del buen entendimiento que hay entre el Ayuntamiento y la escuela, con el fin de optimizar las condiciones, tanto para los alumnos como los padres que dejan y recogen a sus hijos».

En esta línea, recientemente, alcanzaron un acuerdo con la asociación de madres y padres de alumnos (AMPA) «para atender una reivindicación, como es la presencia de más elementos de sombra en la calle de acceso, con lo que plantarán árboles e instalarán unos bancos para sentarse y hacer más llevaderas las esperas de los estudiantes».

TRABAJOS ANTERIORES

Estas medidas se suman a trabajos menores desempeñados en las últimas semanas, como la colacación de nuevas papeleras, que al tener menor altura que los contenedores existentes hasta entonces, facilitan a los niños poder depositar los desperdicios. Con todo ello pretenden finalizar el actual curso en las mejores condiciones posibles, aprovechando que la mayor parte de actividades de la Escola d’Estiu, durante julio y agosto, también tienen lugar en el mismo centro educativo.