Las avenidas del Mar y de España, algunos tramos de la del Papa Luna y espacios de la urbanización Llandels, entre otros viales, serán peatonales este verano. Eso sí, en un horario acotado, a partir de las 19.00 horas. «Mantuvimos reuniones con los vecinos y acordamos que sea así para dinamizar la actividad de la restauración durante la tarde y la noche», explica el alcalde de Peñíscola, Andrés Martínez, quien añade que «la previsión es que se active cuando se permita la movilidad entre autonomías y haya flujo de turistas; para finales de junio o principios de julio».

Durante las jornadas estivales y hasta la hora acordada, la circulación de vehículos estará permitida con normalidad y también la carga y descarga en esas zonas.

Por otra parte, el concejal de Urbanismo, Jorge Rovira, junto al departamento de tráfico de la Policía Local, trabajan en la señalización del paseo marítimo para priorizar el paso de los peatones. La acción comprenderá los más de cinco kilómetros que discurren paralelos a la playa Norte.

«En el paseo, de anchura variable, debe garantizarse el respeto a las distancias interpersonales de seguridad», remarca el edil, a la vez que informó del desplazamiento del carril bici, «se trasladará a la calzada, donde se habilitará un espacio seguro para los ciclistas, y, a la misma vez se posibilita el tránsito seguro y cómodo junto a la playa, únicamente para los peatones».

La actuación, que está en planificación, se ejecutará en los próximos días con el fin de culminar los trabajos antes del mes de julio, cuando se prevé una mayor ocupación de estos espacios.

El proceso para llevar a cabo los cambios se inició hace varias semanas y se consensuó con los vecinos de la zona, usuarios de bicicletas y técnicos municipales.

El primer edil comprobó in situ las mejoras proyectadas y valoró que «las modificaciones que se van a implementar harán compatible un desplazamiento sostenible y seguro para todos».