Varias calles de la zona de Llandells fueron ayer las primeras en acoger las obras de reasfaltado de diferentes puntos del casco urbano de Peñíscola. Una labor que se desarrollará durante las próximas semanas y que tiene que estar finalizada antes del cambio de año. La primera parte consiste en la acción de la máquina fresadora, que se encarga de rebajar el nivel de la calzada preexistente, para que dentro de unos días se proceda a la colocación del nuevo asfalto. Los viales Mestre Roca, Maestrat, Llandells y Blasco Ibáñez centraron los trabajos en la primera jornada, mientras que hoy viernes se seguirá con las calles Vilanova d’Avinyó, Vents, Mestral, Ponent, Cerç y Migjorn. Será el lunes cuando haya dos equipos que actuarán de forma paralela para asfaltar en los espacios que se han ido acondicionando durante esta semana.
cortes // El concejal de Urbanismo, Romualdo Forner, indicó que los vecinos «deben atender a la señalización para que sepan qué día hay cortes en sus calles o por qué puntos de sus trayectos habituales no se podrá circular por unos días». El plan de reasfaltado no se limita a este barrio de Peñíscola, que desde su construcción no había experimentado una labor de mantenimiento de estas características. Posteriormente, se procederá con las avenidas Estación, Papa Luna, Espanya y de la Mar, además de calles de la zona de Peñismar o el camino del Pebret. La actuación tiene un coste de adjudicación de 845.790 euros, IVA incluido, tras el proceso de contratación que ganó la empresa Pavasal.
Las obras han comenzado con algunas semanas de retraso. Estaba previsto que el arranque llegara tras el puente del Pilar, pero hosteleros con terrazas en Llandells reclamaron un aplazamiento para aprovechar los días festivos de Todos los Santos. Tras alcanzar un acuerdo, las terrazas se desinstalaron el miércoles para dejar libre la vía pública y proceder al arreglo de las calzadas. La primera parte quedará acabada el día 15 de noviembre. H
