Si no puedes con tu enemigo, únete a él. La irrupción del comercio digital ha revolucionado la compraventa de productos tanto como en su día lo hizo la llegada de la moneda, que arrinconó al trueque o a métodos más primitivos. Un buen exponente de este auge de Internet es sin duda el Black Friday, el día que inaugura la temporada de compras navideñas con significativas rebajas en muchas tiendas, y los comercios de Rossell no se han querido quedar atrás de estas tendencias, promoviendo varios alicientes para que los poco menos de mil habitantes acudan a comprar.

Las comerciantes de la localidad, junto a la concejal de Comercio Araceli Adrover.

«Está claro que Internet y las grandes superficies también nos están haciendo daño a nosotros, pero no podemos lamentarnos», afirma Cinta Pla, gerente de una tienda de ropa en la localidad del Baix Maestrat desde que tiene uso de razón. En su comercio, los clientes que acudan este viernes se encontrarán «con pequeños descuentos. No ganaré tanto en cada prenda, pero espero tener más ventas para compensar».

Esta es la cuarta edición en la que los empresarios de Rossell, pueblo que cuenta con menos de mil habitantes, se suman a esta iniciativa global. «Los años anteriores no nos ha ido mal», confirma Cinta, que espera «mantener la gente que hay, porque de fuera no vendrán y lo que tenemos que hacer los vecinos es ayudarnos entre nosotros».

«Qui compra i ven ací es fa ric»

Cinta afirma que una de las principales medidas contra el despoblamiento debe ser la de promocionar que los recursos del pueblo se queden en el pueblo: «Siempre digo que ‘Qui compra i ven al poble, es fa ric’». En Rossell existen unos 15 comercios, pero están bien avenidos. Al margen de la tienda de Cinta, en la que se puede encontrar ropa de todo tipo, existen cinco bares, un mecánico, casa rural, peluquerías, panaderías, frutería y ferretería, pero los pequeños empresarios están muy unidos y es por ello que han ido de la mano en esta última campaña del Ayuntamiento.

El alcalde, Evaristo Martí, agradece el compromiso de los comercios: «Todos se han adherido de una u otra forma. El que no hace descuentos promueve sorteos, rebajas o detalles como consumiciones en bares». Añade el primer edil que el objetivo no es otro que el de «motivar el comercio de proximidad» y ya adelanta las medidas para Navidad: «Regalaremos un árbol iluminado para cada tienda y sortearemos tres cestas que se rifarán el 5 de enero».