El pleno del Ayuntamiento de Burriana aprobó anoche una moción institucional para apoyar a los oficios de las poceras y las remendadoras. Estas dos labores las desempeñan, tradicional y principalmente, las mujeres de marineros de embarcaciones de arrastre o de artes menores. Sin embargo, desde la última modificación de la legislación, hace dos décadas, estos oficios no tienen reconocimiento profesional en materia laboral. Ello, a pesar de su importante tarea para cerrar el círculo del trabajo pesquero.

Las poceras son las encargadas de recibir el barco al llegar al puerto. Llevan hielo y las cajas para el pescado... El de las remendadoras es un trabajo centenario y 100% artesanal, que consiste en el mantenimiento de las artes relacionadas con la pesca.

ATRACTIVO // El portavoz del PSOE, Javier Gual, recogió la propuesta del colectivo Adomar (Asociación de Mujeres del Mar), en el que indican que «es una dedicación que supone un atractivo turístico, pero no tiene la categoría reconocida adecuada, ni está valorada».

El representante del PP, Juan Fuster, apuntó que «son ocupaciones desconocidas para la mayoría de la población» y recalcó que «es necesario revisar su regulación en el marco laboral».

La moción solicita inculcar la cultura de entidad inclusiva, invertir en diversidad y formación de un sector tradicionalmente masculino, la obtención de un registro profesional y desarrollar diálogos con poderes públicos.

Por otra parte, se dio visto bueno a la nueva ordenanza de animales, que marca las sanciones y la creación de un carnet para las personas y protectoras que den de comer a las colonias de gatos.

La misma sesión avaló la prórroga del contrato para la gestión del servicio público de mantenimiento de jardinería. Más disputa dialéctica tuvo la autorización a la Diputación para la prestación del servicio de prevención y control de plagas en áreas periféricas y contra los mosquitos.