La UTE Zona 1, como agente público del servicio de gestión de residuos del norte de la provincia de Castellón, aclaró ayer que el incendio que afectó a las instalaciones el pasado 22 de agosto no obligó “en ningún momento” a suspender o paralizar la actividad de tratamiento de residuos municipales, “por lo que no se ha visto afectada la correcta y puntual gestión de los residuos recogidos en las localidades de la zona”.

Asimismo, aseguran que “no se ha generado daño personal alguno, ni ha existido peligro real de propagación hacia el exterior de la instalación”. Y añaden que el suceso no ha provocado daños medioambientales”. H