La elección de dos colegios de Almassora, uno de Segorbe y otro de Altura para iniciar las clases de religión islámica el próximo curso no ha sido recibida como una buena noticia por parte de los Ayuntamientos seleccionados. Una evidencia de ello son las llamadas efectuadas a la Conselleria de Educación por parte de la alcaldesa almazorense, Merche Galí; y su homólogo alturano, Miguel López, para pedir explicaciones una vez conocida una información recibida «con sorpresa».

La más contundente en sus valoraciones fue Galí. En declaraciones a Mediterráneo aseguró que «hemos solicitado --al departamento que dirige Vicent Marzà-- que reconsidere su postura y tenga en cuenta, como criterio fundamental a la hora de decidir la ubicación de la materia, el volumen de población musulmana del municipio, que en Almassora entendemos inferior al de otras localidades de la provincia».

SIN DEMANDA SOCIAL // Basó su argumentación en que «en nuestra localidad no existe la demanda social de recibir esa asignatura que en ningún caso queremos que suponga una brecha entre el alumnado o los diferentes colegios». «La comunidad educativa no nos ha solicitado implantar este tipo de formación, de la que desconocemos en profundidad el proyecto educativo», añadió.

Y remarcó: «Entendemos que antes de poner en marcha la medida debería haberse producido una consulta previa para conocer las necesidades, valorar su repercusión y conocer con detalle el contenido. La voluntad del consistorio es trabajar por la integración y la igualdad entre hombres y mujeres a través de una educación pública de calidad».

El caso de su ciudad es el más llamativo, pues cuenta con dos de los cuatro centros elegidos --el Hermanos Ochando y el Embajador Beltrán--. Al parecer, el imán de Castellón, que es quien ha fijado dónde debería incorporarse esta materia, reside en la población y esta sería la causa.

El alcalde de Altura, por su parte, indicó que había hablado con el director territorial de Educación Robert Roig. «Creo que esta medida no tiene nada que ver con la línea marcada desde la Conselleria», apuntó. Y avanzó que este tema será uno de los que se traten en el consejo escolar municipal que se celebrará hoy.

En este municipio, religión islámica se ofertará en su único colegio público, el Virgen de Gracia. «Es una sorpresa que recibimos con expectación», dijo.

Respecto a Segorbe, fuentes del equipo de gobierno sentenciaron que «tenemos una postura unánime al considerar que la religión pertenece al ámbito privado de las personas». «Nos oponemos a que se impartan clases de cualquier creencia en los centros educativos y lamentamos ser conocedores de esta decisión a través de la prensa», aseguraron.

CONVENIO // Como informó Mediterráneo ayer, desde la Conselleria de Educación matizan que la implantación de esta asignatura en el horario en el que las familias pueden elegir entre religión católica o alternativa se enmarca en el convenio firmado entre el Ministerio de Educación y la Comisión Islámica de España. «La Generalitat solo hace de puente de sus directrices», indican.