El alcalde de Nules, David García, ha trasladado a la Conselleria de Obras Públicas su preocupación por un informe de la Policía Local en el que se alerta sobre «los peligros potenciales» del tramo de carril bici financiado y construido por el Consell como avance del proyecto que, en un futuro, conectará peatonalmente este municipio con la Vilavella.

El documento redactado por el Jefe de la Policía Local es la respuesta a un requerimiento formulado en el pleno municipal por el concejal del Partido Popular, Alejandro Borrás, en el que pedía información sobre los riesgos que estaban denunciando los usuarios habituales de esta vía.

La valoración sobre la seguridad en esta parte de la carretera de la Vilavella es bastante extensa e incluye numerosos defectos. Uno de ellos tiene que ver con que el carril bici no cuenta con conexión ni continuidad. Su trazado comienza en la rotonda de acceso a la N-340 y la A-7 y finaliza antes de alcanzar el puente sobre el barranco de la Serraleta. Para delimitarlo y, en principio, proteger a peatones y ciclistas, se ha instalado un murete de hormigón que estaría detrás de la mayoría de inconvenientes.

La policía indica que «de forma natural, los vehículos salen de la glorieta para incorporarse a la carretera de la Vilavella --dirección a Nules-- y tienen prácticamente que esquivar el primer bloque» a pesar de estar señalizados, dado que se lo encuentran de repente al salir de la curva. De hecho, esta misma semana se ha producido un accidente por un coche que trató de evitar el impacto con el citado murete, un problema agravado estos meses, como consecuencia «de la posición del sol entre las 7.45 y las 8.30 horas», que deslumbra hasta imposibilitar la visibilidad de este obstáculo. Pero es solo un ejemplo de muchos otros, como el de los camiones que para evitar los bloques se ven obligados a cortar la circulación al maniobrar para entrar en las empresas.