En un pleno municipal con poca relevancia por lo que respecta a la aprobación de acuerdos de calado, los dos temas que han centrado la actualidad municipal en los últimas semanas volvieron a acaparar el debate político: la saturación del polideportivo municipal y el cierre de la piscina estival de Sant Josep.

El equipo de gobierno aprobó adjudicar la ubicación del segundo polideportivo municipal junto al Estadio José Mangriñán, tal y como se había anunciado, pero el protagonismo fue para los problemas de saturación del existente y cómo se ha gestionado la problemática suscitada por las horas de pista reservadas para los diferentes clubes. Similares discrepancias entre gobierno y oposición se evidenciaron respecto del cierre de la piscina de verano, que no tendrá rápida solución.