El gobierno en minoría de David García y Centrats en Nules (CeN) se ha dado de bruces con la realidad que, con toda probabilidad, le acompañará durante esta legislatura que acaba de empezar. Y es que ayer la oposición de 10 concejales que conforman PP y PSOE les obligó a modificar sus planes en varios aspectos esenciales, entre ellos, la retribución que recibirá el alcalde, que sufrirá una rebaja aproximada del 1,7% respecto de la propuesta inicial.

polémica / Hasta dos recesos fueron necesarios para alcanzar una acuerdo alejado de las expectativas que se había creado el equipo de gobierno al inicio de la sesión. La propuesta pasaba por una dedicación del 100% para el alcalde (con un salario de 38.460,52 euros brutos), del 100% para el edil de Hacienda, Guillermo Latorre (36.122,80 euros); y del 80% para el de Urbanismo, César Estañol (32.509,09). Finalmente, tras las enmiendas presentadas por PP y PSOE, el munícipe tuvo que conformarse con tres veces el salario mínimo interprofesional, 37.800 euros), y los dos concejales con dedicación, lo harán con un 75% cada uno, con lo que ello supone en retribuciones.

Concretar una negociación a la baja era indispensable para que este punto prosperara, pero no fue la única cesión que tuvo que hacerse. De los dos cargos de confianza que pretendían aprobar, solo uno contó con el respaldo de la oposición, el de secretaría de grupos municipales, frente a los de jefa de gabinete de alcaldía y jefa de comunicación. Además, ni el alcalde, ni los concejales, ni los funcionarios podrán cobrar compensaciones adicionales por participar en las mesas de contratación --como sucedía hasta ahora--, que deberán realizarse dentro del horario laboral.

Para García, lo sucedido en el pleno es una evidencia de que «para el PP y el PSOE no vale hoy, cuando no gobiernan, lo que sí que valía hace cuatro u ocho años, cuando sí que lo hacían».

Desde la oposición fundamentaron su posicionamiento en la racionalidad y coherencia con sus respectivos programas electorales y el funcionamiento del Ayuntamiento hasta el momento, poniendo así de manifiesto con meridiana claridad, que este será solo el primer escollo que lastrará la gestión de un gobierno muy complejo. Con todo, García concluyó diciendo: «Vamos a seguir igual, adelante, con la misma ilusión, trabajando por los vecinos, que es lo que cuenta».