La plaga de mosquitos continúa afectando notablemente a la provincia de Castellón, especialmente al litoral, pese al refuerzo de tratamientos por parte de los municipios. Una problemática de la que se ha hecho eco este rotativo y que, además de afectar al turismo, ya se está convirtiendo en un problema de salud pública, como ayer denunció el Partido Popular de Castellón, que exigió a la Diputación y a la Generalitat una solución eficaz. El presidente provincial del PP, Miguel Barrachina, dentro de la campaña Activemos Castellón, visitó una de las poblaciones más afectadas, Torreblanca, junto a alcaldes y portavoces populares de la zona.
Barrachina advirtió que «tanto la Diputación como la Generalitat tienen que asumir sus competencias y ponerse a trabajar». Y recordó que el Consell anunció la puesta en marcha de una brigada contra los mosquitos «que consistió en hacerse una foto un día, ya que después desapareció». El problema de esta plaga «es que debe coordinarse de forma eficaz con los ayuntamientos, ya que los mosquitos no entienden de fronteras», por lo que debe trabajarse de forma coordinada con todas las administraciones.
Además, criticó que «los constantes cambios de criterios del PSOE están agravando la situación, puesto que en el último pleno de la Diputación la diputada del área y alcaldesa de Orpesa aseguró que los tratamientos aéreos no hacían falta, pese a que los alcaldes socialistas siempre los han reclamado».
La portavoz popular de Torreblanca, Tania Agut, lamentó que «la última gran inversión que se realizó en esta materia fue la que realizó la Diputación del PP la legislatura pasada con un millón de inversión», y pidió a los socialistas «altura de miras y lealtad para solucionar este problema, que también daña las campañas agrícolas de la provincia».
