La urbanizadora Golf Sant Gregori está a la espera de que el Ayuntamiento de Burriana firme el acta de replanteo para poder iniciar los trabajos preparatorios de lo que será la construcción del mayor proyecto urbanístico del municipio. La empresa se ha marcado julio como el mes para que las máquinas empiecen a trabajar en el programa de actuación integrada (PAI). Solo una vez superado el trámite, se podrá transmitir la orden para que comiencen las primeras tareas, tal como figura en uno de los puntos del acuerdo transaccional que en su día firmaron el Ayuntamiento y la empresa urbanizadora.

El proyecto arrancará con los trabajos previos, que servirán para facilitar las labores a la empresa que resulte adjudicataria para llevar a cabo la urbanización de los 2,5 millones de metros cuadrados del proyecto urbanístico. Estos trabajos iniciales se centrarán en el derribo de las viviendas que se encuentran en el futuro suelo público y estarán afectadas por viales o jardines, o en las parcelas propiedad de la empresa.

Aunque en un primer momento habían previsto el desbroce de las futuras calles, finalmente estas tareas se incluirán en el proyecto de urbanización. Asimismo, antes de que se puedan licitar las obras, el consistorio debe dar el visto bueno al proyecto modificado, un documento en el que ha venido trabajando la empresa para, principalmente, adaptar el documento que se redactó hace más de una década a las exigencias y normativas actuales. Entre estas exigencias está la instalación de puntos de recarga eléctrica para vehículos en una de cada diez plazas de aparcamiento. El proceso de licitación y adjudicación se prolongará varios meses, ya que debe concurrir de acuerdo a la normativa europea. Será después del verano cuando Golf Sant Gregori dispondrá ya de empresa adjudicataria del programa.