Llega el frío. Tras un inicio del otoño bastante suave en cuanto a temperaturas, esta misma semana se acerca a la provincia una ola de aire polar, una previsión ante la cual la Subdelegación del Gobierno ha activado el operativo de la campaña de vialidad invernal en Castellón. «El dispositivo está preparado para afrontar cualquier incidencia al objeto de garantizar la seguridad en la carretera y dar cobertura y respuesta de forma inmediata», explicó el subdelegado, David Barelles. Los efectivos ya están dispuestos, ante las previsiones de fuertes descensos de la temperaturas y precipitaciones intensas.

De hecho, el catedrático de Climatología y director del Laboratorio de Clima de la Universitat Jaume I, José Quereda, confirmó ayer a este periódico que en el transcurso de las próximas horas «hay en perspectiva una inestabilidad provocada por la notable irrupción de aire polar, a partir del martes y primeras horas del miércoles». Será la primera gran incidencia de la temporada invernal en la provincia, «con una previsión de precipitaciones que pueden ser acumuladas de 25 a 30 litros por metro cuadrado en la zona costera; mientras que en el interior podrían superar los 50». La incidencia del aire frío bajará los termómetros, lo que puede provocar que parte de las precipitaciones en las cotas más altas sean en forma de nieve.

De esta forma, se dará la despedida definitiva a un periodo veraniego de los más secos y cálidos de los últimos años. La media de precipitaciones entre enero y octubre ha dejado 136 litros por metro cuadrado, la cifra más baja de la serie iniciada en 1964. En cuanto a las temperaturas, la medida ha sido de 19,7 grados, cifra parecida a la de los años más extremos, que fueron 2003 y 2014.

OPERATIVO // Barelles presidió en Albarracín, junto a su homólogo de Teruel, José María Valero, la reunión del comité ejecutivo del protocolo ante nevadas y situaciones meteorológicas extremas en la red de carreteras del Estado de ambas provincias. Las actuaciones se desarrollan de manera coordinada al ser los puntos más conflictivos de Castellón los limítrofes con Teruel. En la reunión se estableció la coordinación en la fase de alerta, es decir, antes de que se produzca cualquier situación adversa. Se trata, según el subdelegado, de que «tanto desde la Unidad de Carreteras como desde la Guardia Civil de ambos territorios exista comunicación a fin de evitar al máximo el tráfico en ambos sentidos».