Tourist go home, Mouriu-vos neoliberals, Precarietat i tristesa, Polítics de merda o Menys policia i més cultura. Estas son algunas de las pintadas que aparecieron en la mañana de ayer en el comienzo de la avenida Papa Luna de Peñíscola. Por el momento, ignoran si es un acto incívico puntual o una oleada de turismofobia, como la que llegó hace unos años en municipios vacacionales, y que también alcanzó en varios puntos este destino.

Ahora, los lugares elegidos han sido las inmediaciones de la caseta de socorrismo más próxima al centro urbano, el punto de venta de tíquets del trenet turístico, así como uno de los paneles informativos ubicados junto a una de las entradas de la playa Norte.

La concejala de Turismo, Raquel París, afirmó que procederán a la limpieza de las zonas afectadas, «aunque en algunas superficies eliminar la pintura no va a ser tarea fácil, además del consecuente coste que esto tiene para la administración municipal, es decir, para todos».

Las pintadas alcanzaron a uno de los nuevos paneles instalados en el paseo para advertir a los visitantes de las sanciones por comprar en los puestos de top manta. Al respecto, la jefatura de la Policía Local indicó que en este mes los agentes se han incautado de 7.000 objetos de venta ilegal, en su mayoría falsificaciones de ropa deportiva y complementos. También se han tramitado 11 denuncias a vendedores y 10 a compradores en la vía pública.