El Ayuntamiento de Alcalà celebró ayer un pleno extraordinario para votar las alegaciones de la empresa que presta el servicio de jardinería contra la decisión de sacar un nuevo concurso. La empresa defiende la materialización del periodo de prórroga apuntado en su contrato, a pesar de que desde el gobierno local apuestan por la conclusión y por este motivo aprobaron las bases para licitar estas tareas.

El concejal de Urbanismo, José Colom, recuerda que el futuro adjudicatario «tendrá que actuar en una gran cantidad de espacios que antes no estaban incluidos, como la Bassa Llona, el entorno de las playas, el camino Sant Miquel o la zona recreativa de Las Fuentes». Además, incorporan cláusulas sociales y criterios de sostenibilidad.

La desestimación de las alegaciones se hizo con los votos a favor del Partido Popular y la abstención del resto de formaciones. Desde el grupo socialista, Adrià Barceló opina que el servicio vigente «contemplaba un aumento del 25%, por lo que se podría prorrogar». El alcalde, Francisco Mars, concluye que las medidas sobre este asunto «se han tomado según criterios técnicos y serán ellos, en la mesa de contratación, los que decidirán».