El departamento de Vía Pública del Ayuntamiento de Burriana es una de las áreas más perjudicadas por la prohibición del Gobierno central de realizar contrataciones nuevas, salvo en los puestos imprescindibles de la administración local. Las jubilaciones de parte de los trabajadores de la brigada han supuesto que, en la actualidad, solo se cubra el 60% de la plantilla, por tanto, resulta muy complicado responder a todas las demandas, teniendo en cuenta que trabajan 16 personas y existen hasta 11 vacantes pendientes de cubrir.

Vía Pública no solo realiza arreglos de bordillos o parcheo de calles, ya que tiene una enorme diversidad de funciones y tareas. “Vía Pública también es fiestas, deportes y cultura, porque cuando no colocan un escenario, montan otro o tienen que repartir o recoger vallas”, explica el concejal responsable, Vicent Aparisi.

“De momento, no podemos contratar y, hasta que no nos dejen, nos vamos a tener que seguir apañando como hasta ahora, pero si queremos que la vía pública esté en condiciones hay que contratar a más personal. Queremos dar un servicio inmediato y, tal y como estamos ahora de efectivos, es imposible”, asegura Aparisi, quien no tiene ningún problema en reconocer que, a pesar de contar con poco personal, la brigada debe atender demandas de otras concejalías.

peones // Ante este falta de efectivos del 40% de personal, han “intentado contratar a gente para suplir esas vacantes”, pero no les “dejan”, aunque las 11 bajas que tiene el departamento se deben a “jubilaciones no cubiertas”. La mayoría de estas plazas pendientes de cubrir son de peones, pero también hay oficiales de área.

Las tareas de estos trabajadores son diversas. Sin ir más lejos, la pasada semana tuvieron que acudir a la playa de Burriana a socorrer los delfines-ballenas calderones que quedaron varados. Se encargaron de sujetar los animales en el mar hasta que llegaron los biólogos del Oceanogràfic. H