La guardería rural del Consorcio del Paisaje Protegido de la Desembocadura del río Millars, formado por los ayuntamientos de Almassora, Burriana y Vila-real, Diputación y la Generalitat, finaliza la campaña de seguimiento y control de tortugas en el entorno natural. El trabajo de campo abarcó cinco meses y consiguió marcar cuatro ejemplares autóctonos y retirar dos exóticos.

Las tareas se desarrollaron en el tramo bajo, capturando tres galápagos leprosos (Mauremys leprosa) y uno europeo (Emys orbicularis). El propósito es recuperar estas especies propias de la zona y ponerlas en valor. Para conseguirlo, es necesario intentar reducir al máximo la presencia de las tortugas de Florida.

Los encargados de los trabajos utilizaron tres trampas, dos de cebo y una flotante en las lagunas artificiales y en Carnicers.