Culla se ha visto sorprendida por un episodio de robos de cobre que ha obligado al Ayuntamiento a prohibir del uso de agua para regadío, provocando también un retraso en la apertura de la piscina municipal. Los hurtos de cables del generador que alimenta las bombas de agua del pozo de la Cullola han agravado la situación hídrica, hasta el punto de tener que limitar el consumo en la población. Un anuncio que oficializaron con un bando.

El punto de abastecimiento, con una profundidad de más de 900 metros, da servicio, en condiciones normales, a los depósitos de la Font de la Llosa y de la Llomatera, que a su vez suministran agua al municipio. Como consecuencia del asalto, al no poder funcionar a pleno rendimiento las bombas en la Cullola, las reservas hídricas se han quedado bajo mínimos, factor determinante para las restricciones.

Uso responsable

El alcalde, Victor Fabregat, apunta que la prohibición solo afecta al uso de agua para regadío; «se puede utilizar con responsabilidad para consumo humano y para abrevar al ganado». «No podemos permitir la extracción mediante cubas para el regadío, ya que las reservas en los depósitos están al limite», destaca. Los episodios de hurtos no son nuevos para el municipio. En este sentido, según apuntan fuentes municipales, el mismo generador ya sufrió el robo del cobre con anterioridad. En aquella ocasión, la reparación fue más rápida y no hubo necesidad de limitar el consumo. «Pedimos disculpas a la población por llegar a esta situación y reclamamos a la Subdelegación del Gobierno y a la Generalitat que refuercen la presencia de policía en el interior para evitar estos sucesos, pues los delincuentes están perfectamente organizados y saben dónde van. Otro robo nos traería más problemas», según Fabregat.

Sin piscina

A raíz del estado del generador, otro de los servicios que sufre las consecuencias es la piscina municipal. La apertura, prevista el pasado sábado, 1 de julio, se ha aplazado debido a estas circunstancias. Por el momento, el problema imposibilita que se llene con los recursos hídricos actuales. El esperado inicio de la temporada de verano tendrá que esperar, al menos, unos días.

Por otro lado, a pesar de que hay masías en el término municipal que se abastecen de otros puntos, como desde Atzeneta, la restricción al riego es total.

Solución

Ayer anunciaron la solución desde la empresa que gestiona los depósitos, Facsa. La reparación del generador permitirá el arranque de las bombas que achicarán el agua para abastecer los depósitos e intentar recuperar los niveles normales.