La Matitapa, el evento lúdico y gastronómico enmarcado en las fiestas mayores de Sant Jordi, se ha consolidado en su tercera edición como elemento dinamizador de la economía local y atractivo turístico. Las tapas, raciones y montaditos se ofrecieron ayer en el emblemático Fossar Vell, de la mano de los establecimientos del municipio, que deleitaron los paladares de vecinos y visitantes con sus sabrosos bocados.

Desde las más tradicionales preparaciones hasta innovadoras propuestas culinarias, las más de 300 personas que se acercaron al recinto pudieron degustar, al módico precio de 3 euros por ración --con bebida incluida--, el resultado del buen hacer de los chefs.

El alcalde, Iván Sánchez, valoró «la implicación y el magnífico trabajo de los participantes que, días antes, ya están pensando en las elaboraciones que van a presentar». Además, hizo referencia a la asistencia de público, lo que augura la continuidad del evento dentro del programa de actos.