Ruptura del pacto de gobierno entre PSOE y Compromís en les Alqueries. El grupo municipal socialista, que encabeza la alcaldesa, Esther Lara, toma esta decisión «debido a las exigencias» de la formación nacionalista «para aprobar los presupuestos del 2018». Insisten en que los dos ediles de su exsocio reclaman «como premisa» el traslado del Casal Jove al edificio que albergaba el antiguo parvulario, junto a la ejecución de la primera fase para rehabilitar el edificio del Replà.

A través de un comunicado, los socialistas explican que no aceptan la mundanza de la instalación juvenil, «pues es totalmente innecesario, ya que se invirtieron más de 280.000 euros en rehabilitar el inmueble», añaden. Es más, acusan a los nacionalistas de «entorpecer el trabajo» del ejecutivo local, situación «agravada en las últimas sesiones plenarias, desembocando en la presión para aprobar las cuentas del 2018».

Por su parte, la portavoz de Compromís, Betlem Albero, lamenta la «decisión unilateral» e «injustificada» anunciada por el PSOE. Para Albero, los desencuentros en los presupuestos son «una excusa, ya que, con voluntad de consenso y de diálogo, había tiempo hasta el 22 de diciembre para llegar a acuerdos». Apunta que en el fondo de la ruptura «parece estar el acuerdo con Ciudadanos», e insta al grupo de Lara a «ser honesto con la ciudadanía».

Por su parte, el portavoz de Cs, Francisco Vicent, que en octubre denunció «una crisis de gobierno» y tendió la mano a los socialistas para llegar a consensos, reitera que los apoyarán para sacar adelante las cuentas, «en aras a la gobernabilidad del municipio». «Nos han ofrecido entrar en el equipo de gobierno, pero de momento no vamos a hacerlo», apunta Vicent, pues aceptan sus requisitos. Se trata, entre otros, de la rebaja de un 10% de las tasas urbanas (alcantarillado y basuras) y de un 5% en el impuesto de circulación de vehículos y la inversión de 120.000 euros del remanente para acabar la iglesia vieja del Replà en el 2018 para que sea un centro etnológico.