El concejal de Urbanismo y primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Nules, Adrián Sorribes, pasó gran parte de la mañana de ayer en el Juzgado de Nules, donde fue citado «en calidad de testigo» en la causa abierta contra el consistorio por lo que el denunciante considera «dejadez de funciones» en el caso del cierre del tanatorio municipal, según él mismo no dudó en informar a la ciudadanía a través de sus redes sociales.

Este caso tiene varias vinculaciones. La primera afecta al anterior equipo de gobierno, dado que el propietario del tanatorio Virgen de la Soledad presentó denuncia por las «irregularidades» que, a su consideración, existían en la adjudicación del servicio de gestión de las instalaciones públicas sitas junto al cementerio.

En este caso, según Sorribes, el actual gobierno se ha visto afectado como consecuencia de «la herencia recibida por los anteriores gestores municipales». Su deseo es que se «esclarezcan las responsabilidades» de este tema en las que se ha visto implicado.