El Ayuntamiento de Vinaròs aprobó ayer en un pleno extraordinario la propuesta para sustituir, en la inversión pendiente del plan Confianza, el proyecto del carril lúdico deportivo a la ermita por la piscina cubierta municipal. El cambio es posible gracias a los votos a favor del equipo de gobierno (Som Vinaròs, PSPV y Compromís) y la oposición del Partido Popular, que denunció la inexistencia de los informes técnicos que avalen y permitan el cambio de proyecto.

El portavoz del PP, Juan Amat, amenazó con “llevar el acuerdo del pleno a los tribunales” porque entienden “que se va a tomar una decisión contraria al derecho”. Amat aseguró que con esta decisión “pueden ponerse en riesgo los dos proyectos y Vinaròs podría quedarse sin carril lúdico y sin piscina”, y pidió la retirada del punto del orden del día.

El alcalde, Enric Pla, por su parte, contestó que el proyecto “es factible”, que tienen los documentos necesarios. También indicó Pla que ambas reformas son muy necesarias para Vinaròs, pero que la piscina no se podrá realizar si no se incluye en este plan, mientras que el carril lúdico podría impulsarse dentro de otros proyectos como la estrategia de desarrollo urbano sostenible e integrado (DUSI).

La concejala del PVI, María Dolores Miralles, argumentó su voto a favor de la piscina cubierta municipal explicando que la propuesta fue ya lanzada en 2009 y que siete años después sigue sin materializarse. “Hacerlo realidad es una deuda histórica con los vinarocenses”, afirmó. También confió que el carril lúdico “será una realidad más adelante”. H