Las tormentas que han afectado esta tarde a buena parte de la provincia de Castellón, que se encuentra en alerta amarilla por fuertes lluvias y viento, han arrasado por completo el edificio de madera de un puesto de salvamento de la playa de Nules.

Una fuerte ráfaga de viento ha levantado del suelo una de las casetas auxiliares de las postas de socorro distribuidas por los arenales para dar servicio al Servicio de Vigilancia y Salvamento Marítimo mientras en su interior se resguardaba un socorrista, que se ha visto sorprendido por el envite.

No obstante, el joven ha salido ileso del accidente, aunque inevitablemente impactado. Además de destrozar la caseta, cuya puerta apareció varios metros hacia el norte, el viento ha volcado la torre de vigilancia, ante la estupefacción de los vecinos de primera línea de la playa de l'Alcudia, que fueron testigos de excepción de lo sucedido.

El socorrista ha salido por su propio pie de entre los restos e incluso se ha preocupado por recoger los desperfectos ocasionados por el vendaval, junto a otro compañero.

La tromba de agua caída sobre Nules ha vuelto a inundar, como suele ser habitual, los pasos subterráneos bajo la vía del tren, y también como es costumbre, el atrevimiento o total desconocimiento de un conductor lo ha llevado a quedarse atrapado en el camí La Mar.

Granizo en Albocàsser

Una corta pero intensa granizada ha afectado también a la localidad de Albocàsser esta misma tarde. Las piedras han sido de pequeño tamaño y, aunque no han afectado a los vehículos, sí que puede conllevar importantes daños en los cultivos de la zona.