La rehabilitación de la Torre Redonda de Morella llega a su última fase, tras la instalación completa del tejado y la restauración de los muros interiores y exteriores, los cuales están prácticamente terminados, al igual que los trabajos arqueológicos. Una de las novedades de la actuación es que se recuperará el nivel del piso original, así como las dimensiones de la puerta, que es muy pequeña. RD