El tercer batallón de la UME (Unidad Militar de Emergencias) del Ejército ha escogido por segunda vez este año Vilafranca como base para realizar sus maniobras de entrenamiento, después de que una expedición de 494 militares se instalara en esta localidad el pasado mes de febrero.

Durante cinco días, 20 efectivos de la unidad especializada de búsqueda y rescate en montaña han realizado ejercicios técnicos de rescate vertical en los barrancos de las comarcas de Els Ports, Alt Maestrat y Alcalatén. Esta vez, al tratarse de una unidad de menor personal, el Ayuntamiento ha cedido las viviendas tuteladas para alojarse.

De nuevo, los altos mandos de la unidad han destacado la «excelente orografía» de la zona para realizar estos ejercicios y la existencia de «barrancos de difícil acceso» que propician la posibilidad de realizar estas prácticas.

El objetivo de estos ejercicios, según detallan desde la UME, es la instrucción del personal para intervenciones de búsqueda y rescate de desaparecidos en montaña o senderistas que se pierden sorprendidos por la niebla.