La Associació Cultural Amics de Vinaròs no cesa en su solicitud de urgente restauración de las arquitecturas fingidas de la fachada de la iglesia arciprestal, al considerar que si no se actúa de forma inmediata se van a degradar y perder de forma definitiva. La entidad ha solicitado al Consell de Transparencia que se le facilite el acceso al informe técnico sobre estos esgrafiados para saber «si se está actuando de forma correcta con nuestro patrimonio».

Amics de Vinaròs ya presentó el pasado 6 de febrero una instancia a la Dirección Territorial de Cultura reclamando la «necesaria» intervención para recuperar estos elementos de la fachada. as arquitecturas fingidas, a lo que se les respondió dos semanas después que se había instado al Obispado de Tortosa para que procediera a su restauración, a la vez que se mencionó la existencia de un informe técnico al que, aseguran, aún no han tenido acceso.

DETERIORO // Y es que, en la actualidad, se hace evidente el deterioro de estos elementos de la fachada de la arciprestal que, hace tan solo seis años, eran perfectamente visibles. Un deterioro causado por la humedad, que ha ennegrecido totalmente los muros por donde cae el agua de lluvia de las gárgolas.

Con todo, y pese a que su restauración lleva años siendo una constante reclamación, aún no se ha concretado actuación alguna por parte de las diferentes administraciones implicadas.

En agosto del 2018 Vinaròs perdió una clara oportunidad de restaurar las arquitecturas fingidas de su primer templo local. Entonces, el obispado de Tortosa, como propietario del inmueble, se presentó a una subvención de la Generalitat para la conservación de bienes inmuebles en la que el 80% de las actuaciones necesarias --que se estimaron en 81.600 euros e incluían el uso de productos para acabar con vegetación y hongos-- las sufragaba la Administración autonómica, y el resto, a partes iguales, el Ayuntamiento y la Iglesia.

Sin embargo, el Obispado tuvo que renunciar a esta ayuda, por cuanto se presentó con el mismo CIF a otras dos intervenciones, una en Forcall y la otra en Cinctorres, cuando solo podía presentarse a una con el mismo documento de identificación fiscal.