Camiones sin cabina, ruedas retiradas de los anclajes e incluso llantas sin neumáticos. Remolques que cargan otros remolques y vehículos pesados que no son para el transporte de animales ni tampoco frigoríficos para los productos cárnicos. Es la descripción de los moradores de parte de la explanada del matadero comarcal de la Plana, cuyo uso debería ser exclusivamente el relacionado con esta instalación pero que, realmente, se utiliza como párking de estos automóviles y lugar en el que se realizan sus tareas de mantenimiento.

Cuando se concibió esta infraestructura, se construyeron unas instalaciones con corrales para la recepción de ejemplares y el sacrificio de los mismos. Se dejó otra gran parte del terreno casi virgen porque se esperaba que empresas de productos cárnicos elaborados se instalasen allí para aprovechar la cadena de frío.

Sin embargo, la expansión industrial anexa con mercantiles conectadas al matadero mediante un túnel de expedición no se ha llevado a cabo y la concesionaria arrastra problemas económicos por la caída de rentabilidad.

Frente a estas previsiones, lo que en la actualidad viene ocurriendo es que se está utilizando parte del solar como zona de estacionamiento y de mantenimiento de unos vehículos que, en muchos casos, nada tienen que ver con la actividad cárnica. Unas tareas que son perfectamente visibles desde el exterior del recinto y afectan a cuestiones muy diversas, entre ellas, el desmontaje de las ruedas de los mismos.

En estos momentos, las instalaciones se asientan sobre un solar calificado como de dotacional público, aunque el Ayuntamiento acaba de iniciar el proceso para recalificarlo a dotacional privado, con el fin de permitir el alquiler de esta superficie.