El Ayuntamiento de la Vall d’Uixó acordó modificar la ordenanza que regula la instalación de castillos hinchables en la vía pública, «para garantizar la seguridad y evitar el intrusismo», según señaló ayer el concejal de Seguridad Ciudadana, Javier Ferreres.

La actualización consiste en cambiar la normativa y rebajar el coste de la solicitud de licencia, hasta ahora de 150 euros. Tras su entrada en vigor, quienes quieran utilizar este tipo de instalaciones en celebraciones públicas o privadas deberán solicitar los preceptivos permisos y pagar «una tasa de 30 euros» que, según Ferreres, «es un coste simbólico» en una «apuesta por la seguridad». Quienes no los pidan serán sancionados.