Dos municipios que también restringirán temporalmente algunos tramos urbanos para beneficiar la reactivación de la hostelería son la Vall d’Uixó y Alcalà de Xivert-Alcossebre.

En la Vall, de hecho, las restricciones empezaron ayer por la tarde y consistirán en peatonalizar durante el fin de semana, desde el viernes por la tarde hasta el domingo por la noche, la calle Salvador Allende, en el intervalo que comprende desde la avenida Jaume I hasta la calle Padre Melià. «Queremos dinamizar la actividad hostelera en esta zona, en la que se concentran un gran número de bares y restaurantes, para que haya mayor seguridad y sea totalmente peatonal», explicó el concejal de Policía y Urbanismo, Javier Ferreres, quien insiste en que la medida es temporal y excepcional. «A medida que avancen las fases de la desescalada y se permita el uso del interior de los locales, se irán reduciendo los espacios exteriores que se han ampliado», apunta.

Por su parte, Alcossebre cerrará sus viales más céntricos --el camino l’Atall y la calle Rench, en ambos casos, desde la calle Alcalà hasta la plaza Constitución, y las calles Vistabella y Sant Benet-- a partir del 19 de junio, pero permitiendo el paso de vehículos a vecinos y para realizar compras por las mañanas.