Mientras otros ayuntamientos de la provincia anunciaban subidas del IBI para cuadrar las cuentas municipales, la alcaldesa de la Vall d’Uixó, Tania Baños, ya avanzó que ese no sería el caso de su consistorio. De hecho, el equipo de gobierno ha decidido congelar este impuesto, porque «durante los últimos cuatro años hemos bajado el IBI una media de 45 euros por ciudadano, lo que supone que se ha dejado de recaudar 1,5 millones de euros», concretó la concejala de Hacienda, Zaida Moreno.

La portavoz del departamento económico municipal realizó este anuncio horas antes de la celebración del pleno ordinario, en el que se concretó la modificación puntual de dos ordenanzas. Por lo que respecta al IBI, hasta el momento existía un requisito para acogerse a las bonificaciones por familia numerosa que exigía que todos los miembros de la unidad familiar estuvieran empadronados en el mismo inmueble, «y no se tenía en cuenta a los padres y madres que están separados o divorciados». A partir de ahora, se anulará esa condición «siempre y cuando se demuestre que los titulares en esta situación tienen la obligación de pasar una manutención» por los hijos.

En cuanto a la que afecta a los vehículos de tracción mecánica, a partir del 1 de enero del 2020 «ya no se bonificará a los coches que tengan más de 25 años» a excepción de los que estén catalogados como vehículo histórico. Moreno justificó esta medida en «motivos medioambientales» porque tras un cuarto de siglo los motores son más contaminantes.