El Ayuntamiento de la Vall d’Uixó y la Cooperativa de Riegos han firmado un convenio para colaborar en la adecuación de la senda de Quistel. El objetivo es «devoler esta zona verde a la ciudadanía», señaló la alcaldesa, Tania Baños, quien rubricó este acuerdo junto al presidente de la entidad, Vicente Ambou.

El consistorio ejecutará las obras de restauración de la balsa, que actualmente se encuentra en mal estado, y completará la puesta en valor esta zona periurbana para «ofrecerla finalmente como ruta turística, puesto que está cerca del paraje de Sant Josep y se convertirá también en un área de ocio y descanso», explica el concejal de Agricultura, Fernando Daròs.

Una vez concluida la intervención, el Ayuntamiento habrá invertido más de 22.000 euros. Por su parte, la Cooperativa de Riegos se encargará de garantizar el abastecimiento de agua a las plantaciones forestales ya existentes y a las que se van a realizar durante esta actuación, así como a los futuros huertos urbanos, tal y como explica Ambou. Este espacio cuenta con un gran interés botánico, gracias al conjunto de algarrobos existente.