El Ayuntamiento de la Vall d’Uixó ha reducido en un 61% la cuenta de acreedores por operaciones pendientes de aplicar al presupuesto municipal. «Es un apartado en el que se incluyen los gastos y facturas para las que no había dinero previsto», tal y como ha explicado la alcaldesa, Tania Baños.

Al respecto, la munícipe recordó que al entrar al gobierno, encontraron «casi 1,1 millones de euros en facturas en los cajones que no tenían dinero guardado» y los han «rebajado hasta 425.000 euros». Para Baños, esto demuestra el esfuerzo que están «haciendo para pagar a los proveedores, gobernando con responsabilidad y con obligaciones económicas que cumplir», argumenta.

El informe de liquidación del presupuesto del 2016 realizado por la intervención municipal también señala que se han amortizado 4,2 millones de deuda. En este sentido, la primera edila indica que están «rebajando el débito de 28 millones que había al acceder al consistorio», detalla.

De hecho, 1,8 millones de euros del remanente de 3 millones de euros del presupuesto del 2015 «se aportaron para ello, porque una ley impuesta por el PP» les «obliga a priorizar el pago a proveedores en lugar de invertir en proyectos de mejora de la ciudad o en ayudar a personas que lo pasan mal», según Baños.

La alcaldesa concluyó que hacen «una buena gestión, porque en la amortización de deuda están los 1,2 millones del préstamo de abono a empresas que pidió el PP, que en el 2012 ingresaba facturas a más de 600 días».