La Vall d’Uixó cuenta con un total de ocho cámaras de seguridad repartidas por diferentes puntos estratégicos de la ciudad. Los dispositivos están instalados en la entrada por la Vilavella (rotonda Moreres), por Valencia (rotonda Eroski), Nules (rotonda de las piedras) y final de Corts Valencianes (rotonda del escudo).

Sin embargo, la mayoría de los aparatos de captura de imágenes, que se colocaron en el 2011, «no han funcionado correctamente desde el primer día porque necesitan señal wifi y, para ponerlos en marcha, había que instalar repetidores y antenas receptoras, ya que la red está dimensionada y presenta interferencias y bandas colapsadas, tal y como advierte el informe técnico», señala el edil de Policía, Javier Ferreres.

Es por ello que, desde el equipo de gobierno, han iniciado las actuaciones pertinentes para poder dar servicio a estas cámaras y reforzar la seguridad en las calles. Para ello, han instalado una torre repetidora más potente y con más altura en el Ayuntamiento y antenas receptoras (espejos) en puntos estratégicos para que la conexión no sufra problemas.

FASE DE PRUEBAS // «Las pruebas iniciales, a cargo de una empresa local, se están llevando a cabo actualmente en la cámara que está situada frente a la Colonia Segarra. Si funciona bien, se replicará el sistema en el resto», informa Ferreres. Todos los trabajos los realiza una empresa local.

El edil asegura que el sistema con espejos «ya se ha implantado con éxito en la sede de Protección Civil o el cementerio, por lo que se espera que los resultados sean óptimos, aunque aún se está en un periodo inicial de pruebas». Otra de las deficiencias a corregir es que la tecnología de grabación no cuenta con visión nocturna.

180.000 euros // El edil critica que en su día se gastaron 180.000 euros en las cámaras, «pero no pensaron que la Vall no estaba preparada para soportar la conexión wifi de los aparatos, por lo que, para hacer llegar la señal al punto de control (retén de la Policía) había que instalar repetidores y antenas receptoras». H