El equipo de gobierno de la Vall d’Uixó quiere transformar en materia de servicios uno de los edificios más utilizados de la ciudad: el mercado municipal. Hace algunos años vio cómo se modificaba su fachada, con la instalación de una estructura superpuesta --la anterior era antigua y presentaba diferentes deficiencias-- y ahora se plantea una transformación que iría más allá de la propia infraestructura, pues se pretende abarcar la promoción de este centro comercial para optimizar su funcionamiento a 10 años vista.

Para asentar las bases de esta propuesta, la Generalitat valenciana ha concedido una subvención de 15.000 euros, en respuesta a una propuesta inicial trasladada desde el consistorio.

El concejal de Comercio, Jorge García, explicó ayer que la intención del equipo de gobierno es plantear acciones a emprender a corto, medio y largo plazo «para dinamizar su actividad y que sea un referente en nuestra ciudad y en las de alrededor».

Entre otras acciones, ya se han mantenido contactos con los vendedores para que aporten sus ideas al respecto, y se realizarán encuestas entre los clientes a pie de calle, en breve. El tripartito quiere hacer partícipe a la ciudadanía de una propuesta para «impulsar el mercado municipal, lo que supone uno de los retos principales que tenemos en el ámbito comercial», señaló García.

La pasada legislatura se iniciaron unas obras en este inmueble, en la planta superior, con el objetivo de crear un vivero de empresas que centralizara la actividad económica emergente.