El Ayuntamiento de la Vall d’Uixó expresó ayer su malestar por la difusión por parte de la Conselleria de Transparencia de una lista de municipios que tienen cuentas pendientes con la Ley de Memoria Democrática, en la que se incluía a esta localidad que, desde que en junio del 2018 derribó la cruz de los caídos de la plaza de la Paz, ya no tenía espacios públicos con esta simbología.

El catálogo aportado por la Generalitat especifica que en la Vall seguía en su lugar el «escudo preconstitucional en la fachada de la iglesia de la Colonia Segarra» y los nombres de alcaldes franquistas en algunas calles. Pero cabe recordar que los nombres de los alcaldes fueron sustituidos por los de mujeres y el obispado retiró el escudo a instancias del consistorio. Unas medidas que impulsaron en los primeros pasos del tripartito, en el 2015.

Por otro lado, Transparencia alegó ayer a Mediterráneo que el listado, que están actualizando, fue remitido hace un mes por la Conselleria de Justicia, responsable la pasada legislatura de los temas sobre memoria histórica.