Tras una primera reunión entre representantentes municipales y vecinos del Grupo La Unión en la Vall d’Uixó, para tratar la problemática de la presión de agua en los bloques de viviendas que se encuentran en las zonas más altas, el consistorio realizará un informe para buscar una solución a un problema que, al parecer, solo afectaría a «algunos» propietarios que no tendrían agua caliente porque el suministro no tiene fuerza suficiente para poner en marcha los calentadores.

Como ya explicó la concejala de Urbanismo, Francesca Bartolomé, tanto los técnicos municipales como los de la empresa Facsa han comprobado que la presión que llega a este barrio «es la misma que tenemos en el resto de la ciudad». Tras visitar uno por uno los domicilios afectados, se habría constatado que existen deficiencias en este sentido únicmente en algunos de ellos.

Sea como sea, como ya manifestó la alcaldesa, Tania Baños, en el pleno del mes de febrero y se corroboró en la reunión con los usuarios fectados, «nos hemos comprometido a dar la solución, en la que estamos trabajando».

En principio, se descarta la cesión de los depositos que proveían de agua a las fincas, «porque el mantenimiento es caro» y ya se estudian alternativas como el bombeo lineal, «aunque nada es definitivo hasta que no se demuestra la eficacia».