El Ayuntamiento de Vila-real aprovecha este periodo, cuando la actividad presencial en los colegios ha quedado suspendida a causa de la pandemia del coronavirus, para efectuar tareas de mejora y puesta a punto de los centros educativos públicos de la ciudad.

La edila responsable explica que «como en estos momentos los conserjes no pueden llevar a cabo sus funciones habituales, ahora mismo son los encargados de acometer labores de mantenimiento esenciales para la adecuada conservación de los colegios». Y añade: «Se trata de intentar aprovechar, en la medida de lo posible, el personal que tenemos trabajando y el hecho de que los centros están vacíos y, por tanto, se pueden desarrollar tareas que con los niños dentro en las aulas y el ritmo habitual de clase es difícil de ejecutar».

El plan incluye, entre otras acciones, el repaso de los accesos, bancos o cerrojos, la revisión del correcto funcionamiento de los baños, así como algunas faenas de jardinería. Además van sustituyendo progresivamente las luminarias por bombillas led.

Por su parte, el concejal de Servicios Públicos, Francisco Valverde, indica que, siguiendo las directrices marcadas por la Conselleria de Educación respecto a la limpieza de todas las instalaciones escolares, «la empresa concesionaria del servicio, Fovasa, es la que está realizando estas labores de una forma intensa y profunda para que, cuando entren los alumnos en las escuelas, estén totalmente desinfectadas».

Desde el consistorio apuntan que la optimización de recursos municipales se extiende también a otras áreas, como la de Deportes, cuyo personal acomete trabajos de mantenimiento u otras funciones para el consistorio.