Los hallazgos rupestres más importantes desde la década de los 80 en la Comunitat ya están protegidos y se pueden visitar en Vilafranca. Hasta ayer, su ubicación era secreta. Tras su cerramiento, tienen públicamente un punto concreto en el mapa junto al río Montlleó. La Volta Espessa, descubierta en el 2013; y la Ferranda, revelada el pasado año, son las situaciones de los dos abrigos.

Su apertura fue presentada en un acto en la sede de Cultura en Castellón. Allí estuvieron el secretario autonómico del área, Albert Girona; el alcalde, Óscar Tena; y los arqueólogos, doctores de ICREA y la Universidad de Barcelona y alma máter de estos éxitos, Inés Domingo y Dídac Román.

El munícipe avanzó que planean habilitar un camino para acceder. «Llegar allí es difícil, está a una hora en 4x4 desde la localidad, con una orografía abrupta», apuntó. También informó de que organizarán rutas guiadas para descubrir a vecinos y turistas estas joyas prehistóricas.

GRAN VALOR // Los yacimientos, de hace 7.000 años, muestran nuevas representaciones de las cuatro especies dominantes en el arte levantino: bóvidos, caprinos, équidos y jabalís, integrados en unas escenas muy dinámicas.

El proyecto es una realidad gracias a 47.000 euros invertidos entre el consistorio, Consell y la Fundación Blasco de Alagón. «La vulnerabilidad de estos bienes nos obligó a seguir unos procedimientos de conservación muy estrictos»», explicó Domingo.

Román señaló que es un «punto de partida» para llevar a cabo nuevas intervenciones. «Urge consolidar la Ferranda y hay mucho por descubrir», concluyó.